Ofelia. Myriam Claro .

Hija del consejero del rey, amada del príncipe... y mujer desdichada.

Ofelia, uno de los grandes personajes de Shakespeare, es la expresión de la obediencia, el amor, la dulce locura. En la obra, aparece por primera vez, cuando está con su hermano Laertes, el cual partirá a Francia. Tanto él como su padre, le advierten que se aleje del príncipe Hamlet, porque no confían en que tenga buenas intenciones con ella. La joven Ofelia, obedece, a pesar de que ama a Hamlet (o se interpreta que así es).

A lo largo de la obra, se convierte en un personaje ambiguo. Obedece a su padre cuando le pide que instigue a Hamlet para saber el origen de su locura. Pero más tarde, parece que el peso de la culpa la atormenta.

Hamlet, suele utilizar con ella un lenguaje más obsceno. En una conversación, cuando son espiados por el rey Claudio y Polonio (padre de Ofelia), el príncipe insiste en que se vaya a un convento, pudiendo referirse a un convento religioso, o tratándola de ramera. Ella, por su parte, intenta devolverle todas las cartas y los obsequios que Hamlet le había dado anteriormente. Ahí, él dice que la amaba, y ella admite haberle creído.

Al saber que su padre ha sido asesinado, se vuelve loca. Pero su locura real contrasta con la fingida del príncipe : mientras que Hamlet es más elocuente, y en su "locura" tiene respuesta a todo y es cruelmente irónico, Ofelia se llena de ‘dulzura’, cantando y saltando por todas partes, haciendo guirnaldas de flores, y bendiciendo a toda persona con la que se encuentra.
Finalmente, Ofelia muere ahogada en el río. No se sabe si se suicidó o si fue un accidente. Pero la reina Gertrudis cuenta en un monólogo, que Ofelia se subió a un árbol para recoger flores, y que la rama en la que estaba, se partió. El anuncio de la muerte de Ofelia es uno de los más poéticos de la literatura.