-El ignorante, si calla, será tenido por erudito, y pasará por sabio si no abre los labios.
-La paz hace crecer las cosas pequeñas, la guerra arruina las grandes.
-El que guarda su boca y su lengua, su alma guarda de las angustias.
-Todos van al mismo lugar; todos han salido del mismo polvo, y al polvo vuelven todos.
-Las heridas que te causa quien te quiere, son preferibles a los besos engañadores de quien te odia.
-Una respuesta blanda, quiebra la ira; una contestación dura excita el furor.
-El amor es fuerte como la muerte; los celos son crueles como la tumba.
-Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón, porque de él emana vida.
-Las ideas se corroboran con sugerencias.
-El ánimo gozoso hace florida la vida; el espíritu triste, marchita los sucesos.
-Exígete mucho a ti mismo y espera poco de los demás. Así te ahorrarás disgustos.
-El hombre sabio busca lo que desea en su interior; el no sabio, lo busca en los demás.
-Nuestra mayor gloria no está en no caer jamás, sino en levantarnos cada vez que caigamos.
-Lo prudente no quita lo valiente.
-Lo escuché y lo olvidé, lo vi y lo entendí, lo hice y lo aprendí.
-El hombre que ha cometido un error y no lo corrige comete otro error mayor.
-La ignorancia es la noche de la mente.
-Los vicios vienen como pasajeros, nos visitan como huéspedes y se quedan como amos.
-Leer sin meditar es una ocupación inútil.
-Transporta un puñado de tierra todos los días y construirás una montaña.
BORJA DOMÍNGUEZ - SERGIO POSE
