Su abuelo fue un gran personaje: se trata de Guillermo IX de Poitiers, duque de Aquitania, el primer trovador. Guillermo de Poitiers no fue un hombre de paz: no sólo tuvo conflictos con sus vecinos o sus vasallos, sino que tuvo problemas con la Iglesia, a causa, evidentemente, de los escándalos de su vida privada, que le llevó a estar excomulgado, aunque por poco tiempo. Pero fue un gran mecenas de trovadores, pintores y pensadores.
Viajó con él a la segunda cruzada a Tierra Santa y se dice que allí cometió adulterio. Por esta razón y porque no había dado al Rey un descendiente varón , anularon su matrimonio en 1152.
Pero Leonor había tenido dos hijas con el rey Luis de Francia; una de ellas Marie de Champagme ( Marie de France) la primera escritora famosa de la literatura francesa.
Leonor de Aquitania fundó las llamadas Cortes de Amor, unos tribunales en los que se trataban asuntos de infidelidades, insatisfacciones amatorias y demás litigios relacionados con el corazón. Leonor y Marie de Champagne, su hija, se rodearon de los mejores trovadores, intelectos y sabios de aquellos tiempos en Poitiers; crearon un código del amor que constaba de 31 artículos, y escribieron pensamientos feministas que escandalizaron a la gran mayoría de los hombres de entonces.
Seis semanas después de la anulación, Leonor contraería matrimonio con Enrique Plantagenet, que en 1154 se convertiria en Rey de Inglaterra como Enrique II. Leonor le cedió sus posesiones, y se convirtio por segunda vez en Reina consorte, en esta ocasión de Inglaterra.
Leonor tuvo ocho hijos con Enrique (5 varones y 3 hijas) y si al principio estuvieron enamorados, con el paso del tiempo, Enrique le fue infiel, ocasionando el distanciamiento entre la pareja.
Lo que si es cierto, es que Leonor, promueve una rebelión contra su marido, apoyada por sus hijos. Enrique II reprimió la rebelión, perdonó a sus hijos, pero Leonor fue confinada en el convento de Salisbury, donde estuvo 15 años recluida, hasta la muerte del rey.
Cuando fue puesta en libertad, aseguró la sucesión al trono de su hijo Ricardo "Corazón de León", que se había convertido en heredero tras la muerte en 1183 de su hermano mayor. En 1189 Enrique II falleció, y como Ricardo había viajado a la tercera Cruzada en el año 1194, Leonor gobernó como regente. En este periodo frustró el intento de conspiración de Juan Sin Tierra (1193), aliado con Francia en contra del nuevo rey. A la vuelta de Ricardo, Leonor concertó la reconciliación entre los dos hermanos y continuó siendo una figura destacada en los asuntos públicos hasta que se retiró a la abadía de Fontevrault, Francia. Falleció el 1 de abril de 1204.
Introduce por tanto el tema del amor cortés en todas esas historias que le gustaban a los bardos bretones, surgiendo así el amor caballeresco que se da en todo el ciclo artúrico. Ahora una dama podía convertirse en el objeto de devoción de un caballero, algo impensable hasta ese momento.
La manera de introducir un cambio tan drástico fue mediante el mecenazgo que esta mujer, y que después continuaría su hija Marie de Champagne, ejercía sobre los bardos y trovadores, haciendo esas obras por encargo y por tanto, haciéndolo al gusto de ellas, mientras que sus maridos están guerreando y no dan demasiada importancia a la literatura.
Uno de los personajes más importantes que estuvieron bajo el mecenazgo de Marie de Champagne, hija de Leonor ,fue Chretien de Troyes. Su prestigio se debe precisamente a novelas caballerescas ( roman courtois) que exploran el mundo céltico. Una de sus obras encargadas es Lancelot o el caballero de la carreta.
Gracias a Leonor tambien son escritas Roman de Rou y Roman de Brut por el poeta Robert Wace, desencadenando esa ultima obra una serie novelas con el tema de Rey Arturo. Pero la influencia de Leonor llega más allá, pues se cree que ella misma sirvió de modelo para algunas de las protagonistas como Ginebra o Isolda.