domingo, 7 de octubre de 2012

La Biblia en el Arte - Maite Guerra Prieto, 2º C Bach.

La Biblia en el Arte – Maite Guerra Prieto 2º C Bach.



- El pecado original y la expulsión del Paraíso (1509, Capilla Sixtina, Ciudad del Vaticano, Roma). Esta pintura de Miguel Ángel (1475-1564) representa un pasaje de la historia de Adán y Eva narrado en el libro del Génesis, primero de los cinco libros del Pentateuco recogido en el Antiguo Testamento. En esta obra aparecen seis figuras. Del lado izquierdo están Adán, Eva y Satanás. Aquí se muestra como Eva, tras haber cedido a la tentación del demonio, convertido en serpiente, coge el fruto prohibido que posteriormente come y se lo dará a Adán, que también comerá. Del lado derecho del fresco vemos la consecuencia de esto. Al enterarse Dios de lo que habían hecho maldijo a la serpiente y mandó a un ángel para que los expulsara del Paraíso, condenándolos a ganarse el sustento con su trabajo y a estar sujetos a las enfermedades y la muerte.

- Abraham y los tres ángeles (1729, Museo del Prado, Madrid). La obra de Giovanni Battista Tiepolo (1669-1770) muestra lo relatado en el Génesis, según lo cual, Abraham y su mujer Sara acogen a tres peregrinos en su casa, a los que generosamente lavan y dan de comer. Éstos, en agradecimiento, se descubren como los tres ángeles enviados por Dios que anuncian al anciano matrimonio el milagro de su próxima descendencia (Isaac), origen del pueblo de Israel (Gn 18, 1-19). Tiepolo pinta el momento en el que los ángeles se le aparecen al patriarca que, exhausto, cae de rodillas con las manos unidas en oración. En el ángulo inferior derecho se distinguen la calabaza y el bastón roto, atributos de los peregrinos, y, a la izquierda, una cesta que contendría la comida compartida.

- Moisés salvado de las aguas del Nilo (1575, Museo del Prado, Madrid). Se trata de una obra de Paolo Caliari, el Veronés (1528-1588) que representa un tema del Antiguo Testamento. Según se cuenta en el Éxodo, el Faraón, por temor al crecimiento de la población israelita, ordena la matanza de todos los recién nacidos judíos. La madre de Moisés lo protege y lo envía, en un cesto de juncos, por las aguas del Nilo. El cuadro refleja el momento en el que una criada recoge al niño y lo muestra a la hija del Faraón. Otra se acerca con un paño para cubrirlo. El resto de las mujeres lo contempla. En el extremo inferior izquierdo aparece un criado con una canasta y, en el lado derecho, otro con un instrumento musical. Al fondo, dos muchachas se disponen a bañarse en el río.

- La Adoración de los Magos (1624, Museo Real de Bellas Artes de Amberes). Este tema bíblico pintado por Pedro Pablo Rubens, ilustra el pasaje de la Epifanía que aparece en el Evangelio de San Mateo (Mt 2-12) del Nuevo Testamento. En el cuadro, la Virgen María extiende una de sus manos hacia el rey Melchor, que ofrece oro al niño, mientras con la otra mantiene al niño ligeramente erguido, transmitiendo placidez y serenidad. San José, detrás de la Virgen, se muestra admirado ante los acontecimientos. Los Reyes Baltasar y Gaspar contemplan el ofrecimiento, aguardando su turno. Asimismo, los soldados y porteadores observan la escena, excepto uno, que mira al espectador.


- La Piedad (1499, Basílica de San Pedro del Vaticano). Esta escultura creada por Miguel Ángel (1475-1564) se basa en el sufrimiento de la Virgen María al tener entre sus brazos el cuerpo de su Hijo, tras ser bajado de la cruz, tema que aparece en el Evangelio de San Lucas (Lc 2, 35), en el Nuevo Testamento. En esta obra, la Virgen, joven, bella y piadosa, cuyas vestiduras se expanden con numerosos pliegues, sostiene a Cristo muerto que, intencionadamente, aparenta mayor edad que su Madre. Esta composición, llena de ternura, trata de representar el idealismo renacentista: una Madre eternamente joven y bella.


- La víspera del Juicio Final (1482, Academia de Bellas Artes, Viena). La fuente para esta representación de El Bosco (1450-1516) es el Apocalipsis de Juan, último libro del Nuevo Testamento. Cuando el tríptico está cerrado se ven las figuras de Santiago el Mayor (izquierda) y San Bavón (derecha). Abierto, el postigo izquierdo recoge el Pecado original, y el derecho, el Infierno. En la tabla central, arriba, Jesús se prepara para el Juicio con los Apóstoles, su Madre y El Eterno. Debajo, los pecadores son torturados por diablos-grillos y figuras monstruosas como castigo a sus propios vicios.


BIBLIOGRAFÍA

- Cabañas Bravo, M. (2004). Summa Artis. Antología. Madrid: Editorial Espasa Calpe.

- Martínez Manero, J. M. ; Miret Magdalena, E. ; Villar Rodríguez, C. (1999). Diccionario de las Religiones. Madrid: Editorial Espasa Calpe.