domingo, 7 de octubre de 2012

La Biblia en el Arte - Maite Guerra Prieto, 2º C Bach.

La Biblia en el Arte – Maite Guerra Prieto 2º C Bach.



- El pecado original y la expulsión del Paraíso (1509, Capilla Sixtina, Ciudad del Vaticano, Roma). Esta pintura de Miguel Ángel (1475-1564) representa un pasaje de la historia de Adán y Eva narrado en el libro del Génesis, primero de los cinco libros del Pentateuco recogido en el Antiguo Testamento. En esta obra aparecen seis figuras. Del lado izquierdo están Adán, Eva y Satanás. Aquí se muestra como Eva, tras haber cedido a la tentación del demonio, convertido en serpiente, coge el fruto prohibido que posteriormente come y se lo dará a Adán, que también comerá. Del lado derecho del fresco vemos la consecuencia de esto. Al enterarse Dios de lo que habían hecho maldijo a la serpiente y mandó a un ángel para que los expulsara del Paraíso, condenándolos a ganarse el sustento con su trabajo y a estar sujetos a las enfermedades y la muerte.

- Abraham y los tres ángeles (1729, Museo del Prado, Madrid). La obra de Giovanni Battista Tiepolo (1669-1770) muestra lo relatado en el Génesis, según lo cual, Abraham y su mujer Sara acogen a tres peregrinos en su casa, a los que generosamente lavan y dan de comer. Éstos, en agradecimiento, se descubren como los tres ángeles enviados por Dios que anuncian al anciano matrimonio el milagro de su próxima descendencia (Isaac), origen del pueblo de Israel (Gn 18, 1-19). Tiepolo pinta el momento en el que los ángeles se le aparecen al patriarca que, exhausto, cae de rodillas con las manos unidas en oración. En el ángulo inferior derecho se distinguen la calabaza y el bastón roto, atributos de los peregrinos, y, a la izquierda, una cesta que contendría la comida compartida.

- Moisés salvado de las aguas del Nilo (1575, Museo del Prado, Madrid). Se trata de una obra de Paolo Caliari, el Veronés (1528-1588) que representa un tema del Antiguo Testamento. Según se cuenta en el Éxodo, el Faraón, por temor al crecimiento de la población israelita, ordena la matanza de todos los recién nacidos judíos. La madre de Moisés lo protege y lo envía, en un cesto de juncos, por las aguas del Nilo. El cuadro refleja el momento en el que una criada recoge al niño y lo muestra a la hija del Faraón. Otra se acerca con un paño para cubrirlo. El resto de las mujeres lo contempla. En el extremo inferior izquierdo aparece un criado con una canasta y, en el lado derecho, otro con un instrumento musical. Al fondo, dos muchachas se disponen a bañarse en el río.

- La Adoración de los Magos (1624, Museo Real de Bellas Artes de Amberes). Este tema bíblico pintado por Pedro Pablo Rubens, ilustra el pasaje de la Epifanía que aparece en el Evangelio de San Mateo (Mt 2-12) del Nuevo Testamento. En el cuadro, la Virgen María extiende una de sus manos hacia el rey Melchor, que ofrece oro al niño, mientras con la otra mantiene al niño ligeramente erguido, transmitiendo placidez y serenidad. San José, detrás de la Virgen, se muestra admirado ante los acontecimientos. Los Reyes Baltasar y Gaspar contemplan el ofrecimiento, aguardando su turno. Asimismo, los soldados y porteadores observan la escena, excepto uno, que mira al espectador.


- La Piedad (1499, Basílica de San Pedro del Vaticano). Esta escultura creada por Miguel Ángel (1475-1564) se basa en el sufrimiento de la Virgen María al tener entre sus brazos el cuerpo de su Hijo, tras ser bajado de la cruz, tema que aparece en el Evangelio de San Lucas (Lc 2, 35), en el Nuevo Testamento. En esta obra, la Virgen, joven, bella y piadosa, cuyas vestiduras se expanden con numerosos pliegues, sostiene a Cristo muerto que, intencionadamente, aparenta mayor edad que su Madre. Esta composición, llena de ternura, trata de representar el idealismo renacentista: una Madre eternamente joven y bella.


- La víspera del Juicio Final (1482, Academia de Bellas Artes, Viena). La fuente para esta representación de El Bosco (1450-1516) es el Apocalipsis de Juan, último libro del Nuevo Testamento. Cuando el tríptico está cerrado se ven las figuras de Santiago el Mayor (izquierda) y San Bavón (derecha). Abierto, el postigo izquierdo recoge el Pecado original, y el derecho, el Infierno. En la tabla central, arriba, Jesús se prepara para el Juicio con los Apóstoles, su Madre y El Eterno. Debajo, los pecadores son torturados por diablos-grillos y figuras monstruosas como castigo a sus propios vicios.


BIBLIOGRAFÍA

- Cabañas Bravo, M. (2004). Summa Artis. Antología. Madrid: Editorial Espasa Calpe.

- Martínez Manero, J. M. ; Miret Magdalena, E. ; Villar Rodríguez, C. (1999). Diccionario de las Religiones. Madrid: Editorial Espasa Calpe.

viernes, 5 de octubre de 2012

Donde quiera que ella estaba, estaba el Edén

Adán y Eva expulsados del paraíso. Marc Chagall
La frase que da título a esta entrada la escribió un famoso autor norteamericano; pertenece a un librillo muy divertido ( a pesar de ser algo  machista y estar lleno de tópicos), inspirado en la historia de Adán y Eva narrada en el Génesis.

No os digo ni el autor ni el título.¡Averiguadlo!. Eso sí copio un fragmento. Espero que os guste.


FRAGMENTO DEL DIARIO DE ADÁN


Lunes.- Este animal nuevo, de larga cabellera, está resultando muy entrometido. Siempre merodea a mi alrededor y me sigue adonde yo voy. Esto me desagrada; no estoy acostumbrado a tener compañía. Debería quedarse con los demás animales. El día está nuboso y sopla viento del Este; creo que tendremos lluvia. ¿Tendremos? ¿Nosotros? ¿De dónde he sacado yo esto de nosotros? Ya caigo. Así es como habla el animal nuevo.


Martes.- Estuve contemplando la catarata grande. Para mí, es lo mejor que hay en este lugar. El animal nuevo la llama Cataratas del Niágara. No entiendo el porqué. Dice que le da la impresión de ser las Cataratas del Niágara. Esto no es una razón, sino simple capricho y tontería. Yo ya no tengo oportunidad de poner nombre a ninguna cosa. Sin darme tiempo a protestar, el animal nuevo va poniendo nombre a cuanto se alza ante nosotros. Y siempre alega idéntica excusa, que da la impresión de que fuera eso.

Miércoles.- Me construí un refugio para defenderme de la lluvia, pero no hubo modo de que lo disfrutase yo solo y en paz. Se metió el animal nuevo y,  ante mis intentos de expulsarlo de allí, empezó a derramar agua por los agujeros que le sirven para mirar, y luego se los secó con el revés de sus garras, y dejó oír un ruido semejante al que hacen los demás animales cuando sufren. ¡Si no hablase! Porque siempre está hablando. Esto suena a menosprecio de este pobre animal, a difamación; pero mi intención no es ésa. Hasta ahora no había oído yo la voz humana, y cualquier sonido nuevo o extraño que rompe el silencio de estas ensoñadoras soledades me hiere el oído y me suena como una discordancia. Además, este sonido nuevo suena muy próximo a mí; encima de mi hombro, junto a mi oreja, tan pronto a un lado como al otro, y yo estoy acostumbrado únicamente a sonidos más o menos lejanos.


Viernes.- A pesar de todo cuanto yo hago, sigue poniendo nombres a las cosas de manera desatinada. Yo tenía pensado para este lugar un nombre muy apropiado, que suena bien y es bonito: Jardín del Edén. Para mis adentros sigo llamándolo así, pero no en público. El animal nuevo afirma que está compuesto de bosques, rocas y paisajes, y que por tanto no se parece a un jardín. Dice que da la impresión de un parque,  únicamente de un parque. Y por eso, sin consultar conmigo, le ha puesto nuevo nombre: Parque de las Cataratas del Niágara. Yo creo que esto es el colmo de la arbitrariedad. Y ha puesto un letrero: PROHIBIDO PISAR EL CÉSPED.

La felicidad de mi vida ya no es la que era.

jueves, 4 de octubre de 2012

Prometeo

          Actualizo una entrada de hace dos años. Creo que no la habéis superado.
                                    
                                                 El mito de Prometeo


Cuenta la mitología griega, que al audaz Titán Prometeo (hijo de Japeto y Climene) le encantaba provocar y desafiar la ira del poderoso señor de los dioses olímpicos, Zeus. Una vez encolerizó tanto al dios del Trueno, que este terminó por quitar el fuego (símbolo de la independencia divina) a los hombres. Zeus esperaba castigar así la osadía de este titán, el cual se consideraba creador y  benefactor de la raza de los hombres.
Pero Prometeo, al que le gustaba presumir de astuto, entró sigilosamente en el Olimpo con el objetivo de robar la divina llama. Tras haber robado tan preciado tesoro del carro del dios Sol, lo devolvió sin tardanza a los desamparados mortales.
Zeus estaba convencido de que debía castigar tanta burla, por eso mandó llamar al dios del fuego y del metal, Hefesto; y le ordenó la creación de una mujer hecha de arcilla. Una vez que estuvo terminada, le dió vida y la envió con el dios de los viajeros, Hermes; el cual la llevó ante el hermano de Prometeo. Esta mujer se llamaba Pandora y llevaba con ella una caja llena de terribles males que jamás debía de ser abierta. Prometeo advirtió en vano a su hermano de que se alejara de cualquier cosa divina, puesto que este se había enamorado ya perdidamente de Pandora y quiso desposarla.
Pandora, que había sido creada con virtudes pero también con grandes defectos como la curiosidad, abrió la caja prohibida y los males se extendieron por el mundo. Con esta treta, Zeus había conseguido vengarse de los hombres.
En cuanto a Prometeo, el señor del Olimpo lo mandó capturar para ser encadenado por Hefesto, a una alta montaña donde, cada jornada, un águila hambrienta le devoraría el hígado. Como el titán era inmortal, el órgano le crecía de nuevo, así que cada noche volvía tan cruel depredador a comérselo, haciendo eterno el sufrimiento inimaginable de Prometeo.
 Tiempo más tarde , según algunas leyendas,Heracles, que pasaba por allí rumbo al Jardín de las Hespérides, lo liberó derribando al águila con una poderosa flecha. Esta vez a Zeus le pudo más el orgullo por la heroica hazaña de su hijo Heracles, que el rencor que anidaba en su pecho contra el titán, así que no persiguió más a Prometeo.
Eso sí, obligó a Prometeo a portar durante toda la eternidad, un anillo en el que se erigía un trozo de la roca a la que tan terriblemente estuvo encadenado.

El mito tiene tres fases:
- La primera corresponde a la creación del ser humano, e incluye el robo del fuego, elemento básico para la elaboración de las culturas y civilizaciones que la conciencia humana ya podía emprender.
- La segunda etapa se refiere a la seducción del hombre por la mujer: Pandora.
- La tercera parte del mito cuenta el castigo (y la posterior liberación) del titán Prometeo.

Influencias del mito en la literatura universal

El mito del titán, influyó enormemente en las obras de varios autores a lo largo de la literatura universal, debido en gran medida al gran simbolismo del personaje de Prometeo.

Prometeo encadenado: ESQUILO

En la literatura griega tuvo mucha relevancia en algunos autores como Hesíodo, pero esencialmente en la tragedia Prometeo encadenado del dramaturgo griego ESQUILO.


El tormento de Prometeo. Rubens

Esta tragedia de Esquilo trata el enfrentamiento entre Zeus y Prometeo, el titán que otorgó el fuego, el conocimiento y la técnica a la humanidad; tomando como referencia el propio mito del titán. Concretamente, el drama nos presenta la parte del mito en la que Zeus castiga a Prometeo, encadenado a las rocas de una montaña, donde un águila le devora el hígado cada jornada, en un castigo por toda la eternidad.

La figura trágica de Prometeo, rebelde contra la injusticia y la tiranía, constituye la encarnación de la libertad humana enfrentada con orgullo al destino.

PROMETEO
[..]
Miradme: soy un dios y, sin embargo,
¡qué trato ha recibido de los dioses!

(Canta)

Mirad con que torturas desgarrado,
por un espacio de años infinito,
aquí he de padecer tormento horrendo.
Tal es el lazo de cadena infame
que contra mí inventó el rey de los Dioses.

PROMETEO

[...]
Robé del fuego, en una oculta caña,
la recóndita fuente que sería
maestra de las artes y un recurso,
para el hombre. Y aquí pago mi culpa
clavado y aherrojado a la intemperie.



 La vida es sueño:CALDERÓN

 El poeta y dramaturgo español Pedro Calderón de la Barca se inspiró en la imagen de Prometeo encadenado para el comienzo de su drama . El monólogo inicial del protagonista,  Segismundo, es muy similar al lamento de Prometeo en la tragedia de Esquilo..
Calderón modificó el mito de Prometeo, para mostrar el tema principal de su obra: la libertad enfrentada al destino, que es muy similar al del mito.

 Monólogo de Segismundo


Yo sueño que estoy aquí
de estas prisiones cargado,
y soñé que en otro estado
más lisonjero me vi.
¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño;
que toda la vida es sueño,
Y los sueños, sueños son.

Prometeo. G.Moreau
 El símbolo de Prometeo en el ROMANTICISMO


El mito prometeico también inspiró a autores del Romanticismo,como el alemán Goethe o los ingleses Lord Byron, P. B. Shelley, y su mujer, Mary Shelley.

Los románticos vieron en Prometeo un prototipo del daimon o genio natural, un símbolo de la rebeldía humana frente a los sistemas preestablecidos o al mismo Dios; la figura por excelencia del encadenamiento, la falta de libertad o del sufrimiento eterno, la representación del hombre liberado tras un duro castigo… Todas estas son nuevas formas de interpretar el mito, vistas eso sí desde la perspectiva de los pensamientos y las ideas de la época.

* Con estos versos de GOETHE se enfrenta  Prometeo a Zeus:

Cubre tu cielo Zeus
con un velo de nubes
y juega-tal un mancebo
que cardos troncha-
en encinares y montañas.
Empero mi Tierra
deja en paz
y mi cabaña que tu no edificaste
 

y mi hogar
por cuyo fuego
tu me envidias.
¡No conozco nada más mísero bajo el sol 
que vosotros dioses! 
Pobremente nutris
con sacrificios
y aliento de oraciones
vuestra majestad
y moriríais
si pordioseros y niños
no fueran locos sin esperanza.
Cuando era un niño
no supe por qué la mirada
al sol volví, perdida,
como si alguien mi lamento oyera arriba
y hubiera un corazón que, como el mío,
pena tuviera del que sufre.
¿Quién me ayudó
contra la furia de los titanes,
quién me salvó de la muerte
y de la esclavitud?
¿Acaso tu mismo no lo culminaste todo,
sagrado y ardiente corazón,
y te consumiste, juvenil y bueno,
engañado, esperando el rescate
del Durmiente ahí arriba?
¿Venerarte yo a ti? ¿Para qué?
¿Has mitigado los dolores de los ofendidos?
¿Has enjugado las lágrimas de los angustiados?

¿Hombre quizás no me formaron
el tiempo omnipotente
y el eterno destino
-mi señor y el tuyo?-
¿Creíste tal vez
que odiar debía la vida
y huir al desierto
porque no todos los sueños maduraron?
Aquí me afianzo
y formo hombres
según mi idea.A ese linaje semejante a mí
para que sufra y llore,
goce y se alegre
y te desprecie
¡Como yo!
Grabado de la novela de Mary Shelley


Frankesnstein o el moderno Prometeo de MARY SHELLEY
  Mary Shelley fue una narradora, ensayista, y biógrafa inglesa ;y una importante figura del Romanticismo.
Esta obra literaria explora temas como la moral científica, la creación y destrucción de vida, la audacia de los seres humanos en su relación con Dios. Este tema concretamente,
da el subtítulo de la obra: el protagonista trata de rivalizar en poder con Dios, como una especie de Prometeo moderno que arrebata el fuego sagrado de la vida a la divinidad.
Está considerada la primera obra de ciencia ficción.

 

Prometeo liberado de P.B. SHELLEY
 Aparte de influir en Mary Shelley, el mito del titán inspiró también a su marido , el poeta anarquista inglés P.B.Shelley, que escribió una obra teatral en verso titulada “Prometeo Liberado”:
Esta es una historia completa de gran intensidad que nos relata una parte del mito de Prometeo, el castigo eterno de Zeus al titán. En las páginas del “Prometeo liberado” cobran voz propia personajes como el espíritu de la Tierra, la Luna, el Océano y Júpiter. La versión de Shelley termina con un gran canto a la esperanza y al triunfo del amor.

 El autor utiliza el mito para reflexionar sobre la lucha del bien y del mal, el enigma de la Creación o la relación del ser humano con las fuerzas naturales.

***También podemos decir que este mito prometeico influyó en otros ámbitos del arte como la música (Ej: “Prometeo”, ópera de Carl Orff ) o la pintura(Ej: “Prometeo”, cuadro de Dirck van Baburen)


Como curiosidad  cabe decir, que el Rockefeller Center de Nueva York es un altar virtual dedicado a Prometeo. Su estatua dorada se erige en la cabecera de la fuente central, con líneas de Esquilo inscritas debajo.

Bibliografía consultada:

-Wikipedia.org
-es.shvoong.com

                                                         Jaime Crespo Bris

martes, 2 de octubre de 2012

Jamal: la reencarnación de Rama - Myriam C.

Como todos sabemos, cada día las ideas originales se reducen más y más para grandes guionistas, directores, y pensadores del séptimo arte que buscan una gran obra cinematográfica que mostrar al gran público. Por eso, he recogido una gran película que está directamente unida a un mito de la literatura antigua, de los que estamos estudiando.



Sin duda, la que más influencia directa tiene, en cuanto a referencias y uso de argumentos, es la película Slumdog millionaire, que está en gran parte basada en el mito del príncipe Rama y su amada Sita. Para los que no habéis visto la pelicula (que está recomendadísima, por cierto), es la historia de Jamal Malik, un joven de la zona más pobre de Bombay (India) que está a punto de convertirse en millonario, gracias al conocido programa "Quién quiere ser millonario". La película va contando su paso por el programa, y cómo a través de los recuerdos de su vida, acierta todas las respuestas, haciendo desconfiar a la gente del programa y a las autoridades.



"Jamal Malik está a punto de ganar 20 millones de rupias. ¿Como lo ha hecho?
A) Ha hecho trampa
B) Tiene suerte
C) Es un genio"


A través de lo que recuerda, conocemos la historia de su infancia: su vida con su hermano mayor, Salim; la muerte de su madre en un ataque de hindúes contra musulmanes; cómo fue recogido de la calle; y cómo conoce a Latika. Latika, era una niña, que al igual que él, huyó del ataque donde murieron sus padres. Desde ese momento, se hacen amigos inseparables, hasta que los "secuestra" Maman, un mafioso que los explota y los envía a mendigar. Cuando intentan huir, Latika queda retenida y tanto Jamal como Salim consiguen escapar. A partir de ese momento, empieza la aventura de Jamal para recuperar a su amada Latika. Al igual que el principe Rama, Jamal salva a Latika de las manos de Maman (quien podría ser la versión de Ravana), y sienten un amor verdadero y fiel el uno por el otro.

(Aqui os dejo un video, que resume más o menos algunos momentos de la pelicula contando la relación de Jamal y Latika)
http://www.youtube.com/watch?v=M9IIJldFs00

Representación del príncipe Rama: de piel azul, armado con un arco y un vesito amarillo 

Curiosamente, una de las preguntas del programa, es sobre la representación del dios Rama (¿Qué lleva en la mano: un arco, una flecha...?). A pesar de la controversia de la pelicula, ganó ocho Oscars, varios Globos de oro, y sus protagonistas Dev Patel (Jamal) y Freida Pinto (Latika) recibieron varios premios honoríficos por sus interpretaciones. Es una gran película, con gran adaptación de su libro original, y además, aunque sea inconscientemente, nos transmite la hermosa historia de Rama y Sita y un poco de literatura universal.

Fragmento del Ramayana



Copio uno de los episodios  más conocidos del Ramayana. El héroe-dios Rama tiene diecisiete años cuando conoce a Sita. 
Sita era la bellísima ahijada del rey Janaka , a la que había encontrado recién nacida en un surco del campo,como si hubiese nacido del seno de la tierra. Cuando llegó el momento de elegirle esposo, el rey Janaka somete a los pretendientes a una prueba: debían tensar un gigantesco y pesadísimo arco. 
Sólo Rama lo consigue ( Recordad que era la encarnación del mismísimo Visnú)

Un día durante uno de sus viajes, llegó a oídos de Rama la belleza y dulzura sin par de la princesa Sita. Su corazón se inflamó y se puso inmediatamente en camino hacia el reino videha, en cuya corte se congregaban ya héroes legendarios de todo el continente.
            Cargó a la espalda su arco y su carcaj de flechas. Los tigres devoradores de hombres, al acecho en la selva, le reconocían y eludían su encuentro. El agua de los torrentes le reconocía y se amansaba al paso de sus sandalias. Hasta el sol le reconocía y le enviaba sus más benignos rayos. Pero Rama, el inexpugnable, era ajeno a tales maravillas, porque en su pecho no había lugar para ningún prodigio que no fuera el de su amor por la más dulce y hermosa de las mujeres, la princesa Sita, la de los ojos de gacela, hermosas caderas y fina cintura.
            Llegó por fin al palacio de Djanaka. Príncipes y reyes, procedentes incluso de los países bárbaros, exhibían ante el rey sus merecidos títulos para convertir en su esposa a la princesa Sita. Ella, entre tanto, se mantenía con la mirada baja, tranquilamente reclinada entre almohadas de seda a los pies de su padre. Pero cuando Rama, el inexpugnable, atravesó los corredores de palacio; cuando Rama, el más glorioso héroe, entró en el amplio salón donde vociferaban  -e incluso amenazaban con la guerra, si el rey Djanaka no accedía a sus pretensiones- los  arrogantes pretendientes, Sita sintió la presencia de un aura poderosa y alzó la mirada por primera vez. Vio al príncipe Rama, y sus mejillas, de color de la miel, se entintaron como cobre batido. Sus ojos de gacela quedaron imantados en los del joven Rama y tuvo la certeza de que nunca jamás podría apartarlos ya de él.

lunes, 1 de octubre de 2012

El mito de Prometeo.Maite Guerra Prieto




                 
1. El Mito de Prometeo

Hijo del Titán Jápeto y de una de las hijas de Océano, Asia o Clímene, y primo hermano de Zeus, Prometeo es considerado el creador de los primeros hombres, a los que modeló con barro. El Previsor, según el significado de su nombre en griego, pasa de ser el simple embaucador que era en sus orígenes a convertirse en el salvador y benefactor de la humanidad, a la que socorrió en dos ocasiones desafiando la cólera de Zeus. La primera vez arbitró un conflicto entre los dioses y los hombres para determinar qué parte de los animales inmolados correspondería a cada uno una vez sacrificados. Prometeo descuartizó un buey e hizo dos montones: uno con la carne y las entrañas cubiertas con la ensangrentada piel, y otro con los huesos, atractivamente envueltos con la blanca grasa. Zeus, seducido por el montón grasiento, dejó la mejor parte a los mortales, gesto que sería el origen de las prácticas rituales de la religión griega, donde sólo se les ofrecía a los dioses los huesos y la grasa de los animales sacrificados. Pero el señor de los dioses, furioso por haber sido engañado, decidió castigar a los mortales privándoles del fuego vital. Fue entonces cuando Prometeo corrió por segunda vez en ayuda de la humanidad y decidió robar el fuego de la fragua de Hefesto para traerlo a la tierra, escondiéndolo en el tallo de una planta. De paso transmitió a los hombres el secreto de muchas técnicas divinas, entre ellas la metalurgia. Esta vez la venganza de Zeus fue terrible. Envió a los hombres una criatura funesta creada para traerles desgracia, Pandora, e impuso a Prometeo un suplicio muy especial: el ladrón fue encadenado por Hefesto a un monte del Cáucaso donde cada día aparecía el águila de Zeus para devorarle el hígado. Liberado por Heracles, que mató al águila, Prometeo aceptó convertirse en inmortal en lugar del centauro Quirón. Zeus autorizó de buen grado su liberación e inmortalidad, agradecido porque Prometeo le había puesto en guardia contra la unión que el señor de los dioses proyectaba con Tetis, desvelándole que el hijo que esta traería destronaría a su padre. Gracias a sus dotes de adivino, Prometeo indicó a Heracles cómo podía hacerse con las manzanas de oro de las Hespérides. Por último, enseñó a su hijo Deucalión el medio para salvarse del terrible diluvio con el que Zeus planeaba destruir a la raza humana y cómo hacer a esta renacer y repoblar la tierra.

2. Obras de la literatura antigua (griega y latina)

El mito de Prometeo, benefactor de la humanidad, perseguido por la venganza divina e iniciador de la primera civilización humana, gozó desde la Antigüedad de una extraordinaria fortuna tanto literaria como filosófica. Ningún mito ha encarnado mejor el destino del hombre en sus luchas y esperanzas, un destino que divide a la raza humana entre los que tienen fe en la acción del hombre, los “prometeicos”, y los que, en palabras de Claudel, están “con todos los Zeus y contra todos los Prometeos”.
De la trilogía que Esquilo (525- 456 a. C.) consagró a este mito, titulada la Prometeida, tan solo nos ha llegado la última pieza, Prometeo encadenado, y algunos breves fragmentos de la segunda, La liberación de Prometeo. En ellas vemos al héroe bienhechor alzarse valientemente contra un tirano malvado, celoso e ingrato, que ha perdido todo el prestigio que rodeaba al gran Zeus de las tragedias anteriores del poeta. Esquilo nos traslada a un ambiente de titánica mitología en el que los personajes son semidioses cargados de significación simbólica. Contemplamos el castigo que inflige Zeus a Prometeo en un desértico peñasco del Cáucaso por haber revelado a los hombres el secreto del fuego y, con ello, el conocimiento de las artes.
Prometeo al dar el fuego a los hombres les ha entregado la cultura. Aunque en el Prometeo encadenado el conflicto se desarrolla entre seres del trasmundo, sin la presencia de hombres mortales, la humanidad constituye el tema y da la sensación de encontrarse presente en los sufrimientos de quien tanto hizo por ella.

Platón, por su parte, sigue en el Protágoras (s. V a. C.) la vertiente popular del mito que Esopo había expuesto en sus Fábulas (s. VI a. C.), que presenta a Prometeo como el creador de todos los seres vivos. Platón nos ofrece una versión sofística de los orígenes de la cultura, y en ella aparece Prometeo contemplado positivamente como quien ha aportado la sabiduría técnica a los hombres. Prometeo es castigado por su delito del robo del fuego, pero los hombres no sufren por ello. Zeus se muestra como un dios benevolente y justo que ofrece a los hombres las cualidades que permiten su vida en común, el sentido de la moral y la justicia (aidón y dike), bases para la téchne politiké.

Después de los múltiples escritores latinos que se inspiraron en el mito, como Lucrecio, Cicerón, Ovidio y Horacio, entre otros, los primeros escritores cristianos, como San Agustín (354-430) o Tertuliano (155-220), llegarán a adoptar la figura de Prometeo, rebelado contra los dioses y crucificado por ello, como una prefiguración del Cristo redentor.

3.Otras obras de la literatura universal

Encontramos al personaje de Prometeo en la Genealogía deorum gentilium de Boccaccio (s.XIV), donde encarna al sabio, al erudito que trae el progreso a los hombres. Su encadenamiento en el Cáucaso simboliza los sufrimientos del espíritu ligados a la investigación. Se trata de una de las más completas recopilaciones de leyendas de la mitología griega, a las que el autor procura dar una interpretación alegórico-filosófica. Análogamente, en La estatua de Prometeo (1669), Calderón de la Barca convierte la figura mítica en un ser cultivado e inteligente que, con el fuego, aporta a los hombres la luz, representación simbólica de la ciencia.

A partir del s. XVII la lectura del mito adquiere tintes cada vez más pesimistas y los escritores a menudo condenan a Prometeo como responsable efectivo de los males de la humanidad. Así Rousseau, en el Discurso sobre las ciencias y las artes (1750), afirma que Prometeo, al inventar las ciencias, arrebató al hombre su bondad original, pervirtiendo su naturaleza inocente. Voltaire, sin embargo, presenta en Pandora (1740) a un Prometeo alzado contra un Júpiter cruel, prefigurando las primeras lecturas románticas.

Muchas obras románticas rinden homenaje a la figura de Prometeo bien como artista o genio incomprendido, como en el Prometeo (1816) de Byron, o bien como un ser dañino y culpable, como en Frankenstein (1818) de Mary Shelley. En el Viaje a Oriente (1851) de Nerval, la historia de Adoniram, el genial escultor rebelado contra Dios y descendiente de la estirpe de Caín, es una reescritura del mito de Prometeo. El drama lírico de P.B.Shelley Prometeo liberado (1818) postula que las propias debilidades de la humanidad son el origen del mal, encarnado en Júpiter; pero el hombre es capaz, sin ayuda de los dioses, de encontrar el camino del Bien.

En su Prometeo mal encadenado (1899), Gide propone una lectura más psicológica mostrando que el águila que atormenta al héroe es en realidad su propia conciencia, que le impide vivir al mantenerlo prisionero de las prohibiciones y del miedo al pecado. Heinrich Müller en su Prometeo (1969) propone una lectura política del mito, subrayando el conflicto entre el progreso revolucionario y el poder establecido. En general, la referencia a Prometeo en el siglo XX, representa toda una tentativa de oposición al orden establecido, a los valores tradicionales, y todo esfuerzo por superar los límites de la naturaleza humana.

4. Cuadros sobre el Mito

Diversos episodios del mito fueron ilustrados plásticamente:

• Su actuación en favor de los hombres (Rubens, Prometeo llevando el fuego, siglo XVII, Madrid).




• Su encadenamiento (Gustave Moureau, Prometeo, 1868, París).



• Su liberación ( Max Klinger, El rapto de Prometeo, s. XIX-XX).





5. BIBLIOGRAFÍA



- Martín de Riquer y Valverde, J. M. (1984). Historia de la Literatura Universal. La Literatura antigua en griego y latín. Barcelona: Editorial Planeta.

- René Martín (1996). Diccionario de Mitología Clásica. Madrid: Editorial Espasa Calpe.